Santo Domingo.- Yoskar Sarante es un intérprete de bachata de sobrada calidad. Se recuerda que cuando pegó (2001) su propuesta "Llora alma mía", bajo el sello Juan y Nelson, logró trascender a Estados Unidos, Eupora y otras partes del mundo. Sarante, dueño de un tono de voz único, vio su sueño hecho realidad, luego de muchas peripecias en el complejoso negocio de la música.
Sarante, tuvo una recaída en su salud, de todos conocidos, pero gracias a Dios, superó la dolencia y continúa en el negocio "dando sus bachatas de calidad". Para ese año, 2001, su carrera estuvo balanceada en un manejo cónsono, desde la promoción hasta la imagen pública, lo que se tradujo en pegada. Yoskar Sarante, se le produjeron DVD, videos clips y todo en andamiaje en su carrera, que lo mantuvieron vigentes por muchos años. Bachatas como "Cama separada", "Por una mentira", "Se muere un hombre", entre otras, son parte del gusto popular, y por supuesto, es un ícono del negocio. A Sarante le hace falta, actualmente, un manejo constante en los medios, una manejo equilibrado en las ventas, un cambio total en el concepto musical, en fin, elementos que bien administrado, le devolveran su espacio. Es un diamante que aún brilla, pero que "debe ponerse, con caracter mediato, en esto. Talento hay, es acción, sin espacio para las teorías y los recursos "ochentosos y noventosos".