Hay cosas que no se han dicho del incidente entre la señora MarÃa Joselyn Morales y el salsero Asdrúbal.
Sólo se conoce el final de la pelÃcula, en que éste asumió una actitud violenta y extrema de golpear en el pecho a la mujer en medio de una discusión por un conflicto aparentemente comercial.
La acción de Asdrúbal desde toda óptica es detestable, pero no deja de ser uno de los tantos conflictivos donde subyacen motivos pasionales.
Preguntábamos sobre la relación más allá de lo comercial entre Asdrúbal y la señora Morales. La "boca del barrio" da cuenta de que entre ellos habÃa algo más.
Una relación sentimental en el pasado y unos vÃnculos extraños con un hijo de la señora querellante que llevan el conflicto a un plano un tanto oscuro.
Bien decÃamos que en los últimos tiempos los grandes escándalos y los conflictos que ocupan la atención de la gente del medio, tienen casi todos que ver con nuevas figuras del ambiente musical y artÃstico: Omega, Vakeró, Martha Heredia, Venya Carolina, El Sujeto, Don Miguelo y ahora Asdrúbal.
Ningún músico o artista de la llamada vieja guardia aparece en esos escándalos barrioteros y vulgares, lo cual es ilustrativo del nivel por donde andan las cosas, en una sociedad de por si ya cargada de violencia, delincuencia, que plantea una amenaza para el espÃritu de convivencia y la misma familia.
Los fundamentos morales que deben cimentar la sociedad se disuelven en una vorágine de irrespeto, violencia, violación a las leyes, como consecuencia de la falta de formación y de educación hogareña.
Los "valores artÃsticos" (asà entre comillas) que se promueven hoy dÃa carecen de principios éticos, lo cual se pone en evidencia con su mal desempeño. Gente que no sabe cómo administrar el momento de fama y de popularidad que están viviendo.
Por ello muchos de ellos caen fácilmente en los vicios o se comportan como antisociales ¿qué se puede esperar de ellos?
Joseph Cáceres