Ahora que ya se hace oficial la venta de la Cervecería Nacional Dominicana, luego que la misma empresa, había desmentido ese hecho, nos preguntamos, ahora, qué harán los aceitosos gerentes de promoción, que en esa empresa, "habían cogido aceite" y se creían dueños de esa empresa. Qué será de los artistas que tenían conexiones bien estrategicas para que apoyaran sus eventos, no importando la dimensión. Con la venta de esa empresa, muchas cosas tendrán que corregirse. La arrogancia de algunos gerentes, llega a su final, porque estamos seguro, que los nuevos dueños, pondrán su gente de confianza en los puestos claves.