La actriz estadounidense Lindsay Lohan acude a sesiones de Alcohólicos Anónimos.
De acuerdo con la página web del periódico español “El Mundo”, la joven de 24 años continúa tratando sus adicciones después de haber estado en un centro de rehabilitación Betty Ford.
La situación incluso le ha permitido acercarse a su padre, quien también sufrió problemas de adicciones.
Ambos acuden juntos a las sesiones AA y el padre de la actriz se muestra optimista ante la situación de Lohan.
“Ha vuelto a ser la chica que fue cuando estaba en su mejor momento. Ha dado un giro de 180 grados”, explicó Michael Lohan. Él mismo declaró ayer que su hija ha pasado todas las pruebas antidrogas a las que se ha sometido.