El cancelado locutor Felix Victorino, ahora "en su quille", por tal decisión, le ha entrado a dos manos, como se dice, a "personeros", que no se arma de valor y menciona, a través de las llamadas redes sociales.
Por qué Victorino no menciona los nombres de los "supuestos lambones de Palacio", que hicieron que "volara del cargo". Incluso, el afirma, que "ellos dicen que él llegaba con una chatica" al poderoso medio, propiedad del magnate Juan Ramón Gómez Díaz.
"Se le fue la guagua", en comentarios. El no se llevó de nadie, porque pensó "que era intocable", pero no fue así.